Los estudiantes que se enojan rápidamente en condiciones de estrés son tres veces más propensos a desarrollar enfermedades cardiacas y además están cinco veces más proclives a padecer un ataque cardiaco a edad temprana, señala un estudio de científicos estadounidenses.
Según el diario venezolano La Nación, la investigación fue realizada con la ayuda de 1.337 pacientes del sexo masculino, debido a que los hombres son más proclive a actuar enojados cuando están estresados, debido a factores culturales.
Desafortunadamente, muchos hombres no reconocen la relación entre el estrés y el enojo hasta sufrir un ataque. Cuando la persona está enojada su cuerpo reacciona como si se encontrara amenazado y tiene la necesidad de defenderse, sin embargo, esta energía no siempre se libera. “Es como si estuvieras con tu vehículo frente a un semáforo en rojo, con un pie en el acelerador y otro en el freno. En una situación así, las llantas empiezan a dar vueltas sin poder avanzar”, indica el documento.
En el ser humano, cuando el enojo no es encausado afecta al sistema nervioso de la persona y al estar enojado el cuerpo libera colesterol, además de una gran variedad de sustancias químicas llamadas catecolaminas, que aceleran el desarrollo de depósitos de grasa en el corazón y arterias carótidas.
El estudio resalta que el enojo es un factor de riesgo de la misma magnitud que el tabaquismo, la obesidad y la falta de ejercicio para quienes tienen antecedentes de enfermedades cardiacas en la familia.
Wálter Vásquez
0 comentarios:
Publicar un comentario